En el estudio de la evolución humana, el Neolítico desempeña un papel crucial para comprender la transición de nuestros antepasados de un estilo de vida cazador-recolector a una sociedad agrícola. Pero, ¿qué fue exactamente el Neolítico y cuándo tuvo lugar? En este artículo exploraremos la importancia de este periodo y la época aproximada en que comenzó.
El Neolítico: Una introducción
La Edad Neolítica, también conocida como la Nueva Edad de Piedra, se refiere a un periodo significativo de la historia humana caracterizado por el desarrollo de la agricultura, la domesticación de animales y el establecimiento de asentamientos permanentes. Esta época transformadora marcó el final de la Era Paleolítica, en la que los humanos dependían principalmente de la caza y la recolección para sobrevivir.
Durante el Neolítico, nuestros antepasados empezaron a cultivar cosechas, como el trigo, la cebada y las legumbres, y a criar ganado, como ovejas, vacas y cerdos, para la producción de alimentos. Esta revolución en la agricultura condujo a un excedente de producción de alimentos, lo que facilitó el crecimiento de las poblaciones humanas y el surgimiento de estructuras sociales más complejas.
Datación del Neolítico
Determinar el año exacto en que comenzó el Neolítico puede resultar difícil debido a las variaciones regionales en el desarrollo y la adopción de la agricultura. Sin embargo, basándose en los hallazgos arqueológicos y en una amplia investigación, en general se está de acuerdo en que la revolución neolítica tuvo lugar entre 10.000 y 6.000 a.C. (Antes de la Era Común).
El momento exacto puede variar según las distintas partes del mundo. Por ejemplo, se cree que el Neolítico en Oriente Próximo, a menudo denominado la «cuna de la civilización», comenzó alrededor del 10.000 a.C.. En cambio, otras regiones, como el norte de Europa, experimentaron esta transición mucho más tarde, hacia el 6.000 a.C.
Significado del Neolítico
El Neolítico fue un punto de inflexión fundamental en la historia de la humanidad. Supuso un cambio fundamental en las sociedades humanas, transformando su modo de vida y sentando las bases para el avance de la civilización tal y como la conocemos hoy.
Con la adopción de la agricultura, nuestros antepasados pudieron establecer asentamientos permanentes, lo que condujo al desarrollo de comunidades y al crecimiento de las civilizaciones. El excedente de producción de alimentos proporcionado por la agricultura no sólo sustentó a poblaciones más grandes, sino que también permitió a los individuos especializarse en diferentes oficios y artesanías, lo que condujo a la aparición de diversas profesiones y a la mejora de la calidad de vida.
Además, la revolución neolítica desempeñó un papel crucial en el establecimiento de estructuras sociales complejas, ya que la agricultura requería la cooperación y la división del trabajo dentro de las comunidades. Comenzaron a desarrollarse sistemas de gobierno, religión y cultura, que contribuyeron a la fundación de las primeras sociedades organizadas.
Conclusión
Aunque el año exacto en que comenzó el Neolítico puede variar según las distintas regiones, en general se acepta que este periodo transformador tuvo lugar entre el 10.000 y el 6.000 AEC. La llegada de la agricultura y la domesticación de animales durante esta época revolucionó las sociedades humanas, dando lugar a importantes avances en la civilización.
Entender el Neolítico es esencial para comprender las raíces de nuestra existencia moderna y los cambios fundamentales que se produjeron en la vida de nuestros antepasados. Desde sus humildes comienzos, la humanidad se embarcó en un viaje que allanó el camino para un progreso notable y configuró el curso de la historia humana.